Una mirada mordaz, divertida y honesta de las relaciones modernas que analiza la realidad cotidiana. "Closer" es la historia de cuatro extraños (Julia Roberts, Jude Law, Natalie Portman y Clive Owen), de sus encuentros casuales, de sus atracciones instantáneas y de sus traiciones ocasionales.
Son personajes actuales, hedonistas, adictos a la recompensa inmediata, marcados por el miedo a sufrir, que buscan de manera insaciable un placer imposible.
“CLOSER” cuyo significado literal es “Más cerca”, eso es lo que necesitan ávidamente todos los personajes de esta película: estar más cerca, tener intimidad, como sea, a cualquier precio. Los cuatro se buscan y se necesitan de manera compulsiva pero, también compulsivamente, mienten y se traicionan, se abandonan y se pierden.
Enfocan sus miedos personales a la relación de pareja de un modo corrosivo, egoísta, que conlleva al desorden emocional que el amor provoca en ellos, se hieren y se aman en la misma medida y con la misma facilidad. Una forma de cuasi-amor que pierde al que lo padece y le aleja de la persona amada, en lugar de encontrarse con ella, derivando todo ello en una inevitable autodestrucción sentimental.
En su postulado sobre la pasión, el matrimonio y la posesión, se aportan magníficos diálogos llenos de dureza, crueles y sexualmente duros, tan directos que parecen reales, podrían estar protagonizados por personas cercanas a nuestra propia vida. Pero que termina por convertirse en una muestra del vacío y la desesperación a las que conllevan la infidelidad, el duro pago a la traición y a los celos como parte de un individualismo que desmonta cualquier faceta romántica del sentimiento.
Parece querer evidenciar en todo momento que el hombre y la mujer nunca están conformes con lo que tienen, con la felicidad efímera que no saben disfrutar, debido a su profundo sentimiento de inseguridad y de angustia.
Y en ese desarrollo de un argumento enfocado a la crueldad y el sadismo en la pareja, de gente que es incapaz de querer pero expertos en odiar y hacer daño, sugiriendo que el tiempo no significa nada en absoluto en las relaciones de pareja. Podemos ver la escena que más brillante me parece destacar de esta película por la hiriente honestidad de unos diálogos afilados, a través de los cuales los protagonistas se escupen los detalles de sus escarceos amorosos para herir al contrincante, devolverle el golpe o infligir daño para evitar sentir dolor.
Muestra los mecanismos y resortes psicológicos que se ponen en funcionamiento ante el amor y el desamor: inseguridades, temores, dependencias, chantajes, deslealtades, venganzas, culpabilidades, juegos de seducción, complicidades, conceptos de posesión y control... Asimismo, "Closer" respalda un estimable estudio de los celos —celos sentimentales, pero también sexuales—, de la fragilidad que el amor otorga a nuestras vidas, del valor de la sinceridad y la necesidad, en ocasiones más oportuna, de la mentira. En este último sentido, la sorpresa que reserva su final —nada estruendoso en lo formal; pero un pequeño detalle cuya importancia obliga a replantearnos lo visto— es altamente reveladora.
lunes, 2 de abril de 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario